Cuando decidí darle forma a la identidad visual de mi marca, opté por algo atemporal y versátil. Elegí una paleta de colores neutros, buscando transmitir la belleza de la simplicidad, un enfoque minimalista. Quería que mi marca reflejara la elegancia en lo sencillo.
Para la elección de la tipografía, elegí una fuente con serifa, que añade ese toque extra de sofisticación. Quería asegurarme de que cada elemento comunicara con una estética bien cuidada y pensada en cada detalle.
En resumen, mi marca busca reflejar la belleza en la simplicidad y la elegancia atemporal en cada aspecto de su identidad visual. ¡Espero que lo disfrutes tanto como yo!